El flamenco es un género musical arraigado en nuestra cultura. Con el tiempo ha ido evolucionado a lo largo de los años, absorbiendo influencias de diversos estilos musicales y por lo tanto se ha un convertido en un género muy versátil. Una de las bandas más emblemáticas en fusionar el flamenco con otros géneros como la rumba y el pop fueron Los Chichos . Y uno de los discos más icónicos de esta legendaria banda, fue el primero, titulado ‘Ni Más Ni Menos’, lanzado en 1974.
Y ¿Por qué este disco era diferente y sonaba diferente? Tendríamos que adelantarnos unos años antes, gracias a la llegada de turistas provenientes de otros países, buscando el Spain is different que propagó el Ministerio de Turismo de aquellos años, hizo que entraran nuevas músicas, nuevos discos e incluso nuevas formas de entender la vida. Hizo mucho también la llegada de los americanos a las diferentes bases militares que negoció la dictadura.
Los güateques y boîtes de la época iban cambiando su banda sonora y -aunque seguían- las canciones lentas, también estaban llegando artistas de corte pop de la época como Los Brincos, Los Bravos o Los Ángeles
Los Chichos cantando verdades
Las grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Sevilla iban aumentando su población. Miles de españoles llegaban desde otras regiones y muchos pueblos, buscando trabajo y mejoras en sus condiciones sociales. Mientras las ciudades crecían, también lo hacían las zonas marginales. Esa música que se escuchaba, no dejaba de ser una evolución de la rumba catalana.
También cambian la temática de las canciones. Unas letras que conectaban con una situación que también se vivía en España y que distaba mucho de aquel ‘España es diferente’. Sus temas abordan la marginalidad, la delincuencia, la cárcel, las drogas y el amor
Aquellas canciones eran un reflejo de los problemas que se vivían a diario en esos barrios nacidos como patios traseros en los que se iban hacinando los emigrantes que abandonaban el campo para buscar nuevos horizontes. La realidad es aquellas calles estaban llenas de barro con pocos o casi ningún servicio público y donde la llegada de la droga arrasó con al menos una generación de jóvenes que no veían otro futuro, en una España que estaba cambiando sí, pero dejando atrás a una parte de ella.
Música sencilla, pegadiza = la realidad
Quizás no tenían melodías muy elaboradas ni tampoco apelaban a una modernidad, pero hablaban de una realidad de la que ellos eran protagonistas.
Los Chichos son el paradigma de la rumba marginal. Sus canciones o las de otros compañeros de profesión han servido de banda sonora a muchas películas del llamado cine quinqui. Directores como José Antonio de la Loma, Eloy de la Iglesia, Iquino o Saura han incorporado a sus rollos de película.
Los Chichos nacen en 1973 como un trío compuesto por Juan Antonio Jiménez Muñoz, conocido como Jero o Jeros y los hermanos Emilio y Julio González Gabarre. Al poco de comenzar su carrera haciendo bolos por salas de fiesta consiguen un gran éxito con su primer single ‘Quiero ser libre’, al que seguirán ‘Ni más ni menos’ y ‘La historia de Juan Castillo’, tres canciones que están en la memoria musical de todo un país.
Por cierto, el nombre del trío viene del mote de un familiar de Emilio que le llamaban chicho.
«Ni Más Ni Menos», Una Joya Musical
La década de los ochenta fue la consagración del grupo. Sin embargo, cuando estaban en lo más alto, el grupo se vio afectado por el abandono de Juan Antonio Jiménez en 1990.
El del medio de Los Chichos
Jero era el compositor de la mayor parte de los temas y el grupo se resiente, aunque continúa su andadura. Jero, por su parte, inicia una corta carrera en solitario que termina cuando en 1995 cuando por diversos problemas de salud, fallece en su piso en el Pozo del Tío Raimundo. Un final tan trágico como algunas de las canciones de Los Chichos. A partir de ese momento Jero se convierte en leyenda.
Jero, sin olvidar sus raíces, compra para todos sus vecinos, electrodomésticos como lavadoras, televisiones, neveras y es que además de artista, era gitano humanitario y ante todo, muy humilde.
Con su característica mezcla de palmas, guitarras flamencas y letras emotivas, «Ni Más Ni Menos» supo combinar la esencia del flamenco con un enfoque más contemporáneo. Sus rumbas eran callejeras, fuera de lo común y cantando en sus letras en caló, algo inaudito que nunca nadie se le había ocurrido, gusta mucho y entran muy bien en el pueblo gitano.
Ni Más Ni Menos: La canción que da nombre al álbum es una declaración de principios de la banda. En ella, Los Chichos abogan por aceptar a las personas tal como son, sin juicios ni prejuicios
- Mami: Esta canción es un homenaje a las madres y su papel en la vida de sus hijos. La emotiva voz de Julio González se entrelaza con la guitarra flamenca, creando una atmósfera conmovedora.
- La Cachimba: Una rumba contagiosa que combina elementos de la música gitana con un ritmo bailable. Es difícil no mover los pies al escuchar esta canción.
- Quiero ser libre: Vivir en una cárcel y a la vez, perder la libertad. Las peleas, las navajas, los robos… muy habituales en aquellos años
- La historia de Juan Castillo: La canción describe una noche llena de tristeza, lágrimas y, en última instancia, traición. Dos primos y dos hermanos se embarcaron en una misión, con la intención de llevar a cabo un robo.
‘Ni Más Ni Menos’ no solo fue un éxito comercial, sino que también dejó una huella indeleble en la música española. Los Chichos fueron pioneros en fusionar el flamenco con otros géneros, allanando el camino para muchas bandas posteriores. Su capacidad para conectar con la gente común a través de letras honestas y emotivas los convirtió en íconos culturales.
El primer álbum de Los Chichos es un tesoro en la historia de la música española. Con su fusión única de flamenco, rumba y pop, la banda dejó una marca imborrable en la escena musical
Las canciones de este disco siguen siendo amadas y escuchadas por generaciones de fanáticos, y el legado de Los Chichos perdura como uno de los más importantes en la música flamenca contemporánea. Este álbum es un recordatorio de que la música puede unir culturas y estilos de vida de maneras inesperadas y hermosas.
Como apunta el portal vinylroute.com, se calcula que Los Chichos, con ventas solo en España, han vendido alrededor de 22 millones de discos (contando las cintas de cassette). Les pondría casi a la altura de Alejandro Sanz que tiene alrededor de 25 millones.
En pleno siglo XXI, su música sigue estando presente en verbenas, ferias, coches de choque y barrios periféricos. Esos barrios siguen estando dejados de la mano de Dios.